FN

¿Te das cuenta? Llevamos una semana y tanto separados y por fin me he decidido a hablar conmigo misma de esta situación. Lo primero de lo que me he dado cuenta y hay que destacar es de que estoy mejor de lo que pensaba, creía que iba a hundirme, que iba a llorar todos los días e incluso que llegaría al punto de suplicarte que volvieses a mi lado, pero no, me siento bien, con ganas de hacer mil cosas de reír cada segundo del día. 
Me hiciste creer que yo tenía la culpa de todo lo malo que nos estaba pasando. ¡Hiciste que me lo creyera! Confiaba demasiado en ti, te aprovechaste de eso. Sinceramente hubiera preferido mil veces que me contases lo que realmente estaba pasando (sabes perfectamente a lo que me refiero a si que no entremos en detalles). En fin, durante un par de días me sentí lo peor del mundo, hasta que abrí los ojos y me di cuenta, en esos momentos de sentí tonta, si has leído bien, tonta. Luego pasaste a darme pena y empece a compadecerme de ti. Me pareció penoso tu comportamiento, te consideraba una persona lo suficientemente madura para tener dieciseis años y me defraudo ver como realmente eras. También te odie, seamos sinceros, pero luego me pregunte que de que servia eso, que para que amargarse. Algo tendrá ella que no tenga yo, ¿no crees? Y por último he querido llamarte, lo sé, parece extraño pero es cierto, me di cuenta de que vivimos algo bonito. Quería agradecerte los muchos momentos buenos que me diste, las cosas que aprendí de los errores, las veces que me hiciste sentir especial a tu lado, los cinco bonitos meses que compartimos y por último por haberme echo darme cuenta de que ahí fuera hay alguien que algún día aparecerá en mi vida y no se marchara nunca, alguien que no eres tú.